viernes, 25 de diciembre de 2009

Estructura del Sol

La Fotósfera
Gran parte de la energía que recibimos del Sol es la luz visible (blanca) que emite la fotósfera. La fotósfera es una de las regiones más frías del Sol (6000 K), donde sólo una pequeña parte (0.1% ) del gas está ionizado (en estado de plasma). La fotósfera es la parte más densa de la atmósfera solar, pero es aún muy tenue, en comparación con la atmósfera de la Tierra (0.01% de la densidad del aire al nivel del mar). La fotósfera parece aburrida a primera vista: un disco con unos puntos negros. Sin embargo, en estas manchas solares existen campos magnéticos muy fuertes. Se piensa que en el campo magnético solar controla la compleja actividad solar. Los Magnetógrafos miden el campo magnético de la fotósfera.

Debido al gran calor proveniente del centro, el interior del Sol por debajo de la fotósfera (zona de convección) burbujea como una olla de agua hirviendo. Las burbújas de materia caliente que sube se ve en la fotósfera como regiones ligeramente brillosas. Las regiones más obscuras ocurren donde el plasma frío se sumerje hacia el interior. Este movimiento constante de convección se llama el patrón de granulación solar.

La fotosfera consiste en una capa de gases que se hallan bajo fuertes presiones. Vista con telescopios, presenta una fina granulación (flóculos) y bordes netos. De ella emana la radiación que emite la estrella. Su superficie consiste un fondo luminoso sobre el cual aparecen fáculas que, por hallarse a mayor temperatura, son aún más brillantes. Inversamente, se forman en unos huecos o depresiones profundas, las manchas solares, por las cuales se ve la capa inferior, menos caliente, y por consiguiente, es más oscura en apariencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario